sábado, 13 de julio de 2019

EL EVANGELIO DE SAN JUAN.9
Yo soy la luz del mundo”.
Es una prueba para facilitar la FE, que cuando Jesús dijo esto, curó a un ciego de nacimiento.
Es doloroso pensar que haya personas que por más pruebas tengan delante, no crean, como les sucedía a los judíos:
  • He venido a este mundo para un juicio, para los que no ven, vean, y los que ven, se vuelvan ciegos”.
  • Sí claro, los que creen saber todo, los que piensan tener ellos propias luces, no dejan de ser ciegos.
  • Al no ver,
  • Al andar en tinieblas.
  • Desprecian la verdad que salva.
  • Y así, los que creen ver,
  • ¡Se quedan ciegos!
______________________________
  1. Yo soy la resurrección y la vida, el que cree en mi, aunque muera, vivirá”.
Fijaros en este milagro impresionante:
  1. Lázaro lleva cuatro días enterrado.
  2. María le dice a Jesús: “Ya huele”.
  3. Bueno, habrá mayor demostración de que Él es la “Resurrección y la Vida”.
  4. ¡LE DA VIDA A UN CADAVER!
Pues, a pesar de ello, los judíos seguían sin creer en Él.
Los que tenemos FE, debemos dar gracias, y pedir que no nos falte:
  • Un Obispo, había consagrado a un sacerdote.
  • Este sacerdote, perdió la fe y vivia mal.
  • Cayó enfermo y fue a visitarlo el Obispo.
  • El Obispo, le pedía que se arrepintiera para darle la absolución.
  • El Obispo insistía: dime que sí… dime que te arrepientes… dime que quieres y te doy la absolución.
  • Y el sacerdote le contesta: “¡Si es que no creo!”
  • No se llegó a saber si el Obispo consiguió su arrepentimiento.
(SEGUIRÁ)

No hay comentarios: