EL
EVANGELIO DE SAN JUAN.9
“Yo
soy la luz del mundo”.
Es
una prueba para facilitar la FE, que cuando Jesús dijo esto, curó a
un ciego de nacimiento.
Es
doloroso pensar que haya personas que por más pruebas tengan
delante, no crean, como les sucedía a los judíos:
- “He venido a este mundo para un juicio, para los que no ven, vean, y los que ven, se vuelvan ciegos”.
- Sí claro, los que creen saber todo, los que piensan tener ellos propias luces, no dejan de ser ciegos.
- Al no ver,
- Al andar en tinieblas.
- Desprecian la verdad que salva.
- Y así, los que creen ver,
- ¡Se quedan ciegos!
______________________________
- “Yo soy la resurrección y la vida, el que cree en mi, aunque muera, vivirá”.
Fijaros
en este milagro impresionante:
- Lázaro lleva cuatro días enterrado.
- María le dice a Jesús: “Ya huele”.
- Bueno, habrá mayor demostración de que Él es la “Resurrección y la Vida”.
- ¡LE DA VIDA A UN CADAVER!
Pues,
a pesar de ello, los judíos seguían sin creer en Él.
Los
que tenemos FE, debemos dar gracias, y pedir que no nos falte:
- Un Obispo, había consagrado a un sacerdote.
- Este sacerdote, perdió la fe y vivia mal.
- Cayó enfermo y fue a visitarlo el Obispo.
- El Obispo, le pedía que se arrepintiera para darle la absolución.
- El Obispo insistía: dime que sí… dime que te arrepientes… dime que quieres y te doy la absolución.
- Y el sacerdote le contesta: “¡Si es que no creo!”
- No se llegó a saber si el Obispo consiguió su arrepentimiento.
(SEGUIRÁ)
No hay comentarios:
Publicar un comentario