16-4-20
HAY QUE CONVERTIRSE PARA QUE JESÚS
TE ABRA EL ENTENDIMIENTO Y PUEDAS COMPRENDER LAS ESCRITURAS.
Esta es una de las enseñanzas que
nos deja las lecturas de hoy. Podemos meditarlas.
A Jesús Resucitado no le reconocen
ni la Magdalena, ni los discípulos de Emaús, ni los apóstoles.
Ellos están todavía con las cosas de este mundo. Los discípulos,
en el Evangelio de hoy, (Lc.24,35-48), se asustan al verle, no
terminan de creerselo. Tienen que palparle, ver las llagas, darle de
comer, y todavía quedaron perpeplejos, pero con mucha alegría.
Dice Lucas que “entonces les abrió
el entendimiento para comprender las Escrituras”.
¿Qué les pasaba? ¿Por qué no le
reconocían? Les faltaba la luz del Espíritu Santo, que es cuando se
ve con los “ojos del alma”.
Un rayo de esa luz se la dió Jesús
para que entendieran las Escrituras, pèro fue en Pentecostés cuando
se llenaron de esa Luz Divina, que ya les acompañó toda su vida,
porque ya no se pusieron en peligro de abandonarla.
Por eso los Apóstoles, pudieron
decir a los que les escuchaban, en la primera lectura de los Hechos,
que Dios les bendecirá si se convierten de sus maldades.
Todo bautizado ha recibido al
Espíritu Santo, pero dependerá de él que permanezca como lo hizo
con los Apóstoles, que estaba con ellos como uno más, acordaros,
“Hemos decidido el Espíritu Santo y nosotros…” (Hch.15,28)
Aquí tenemos otra razón más para
decir a todos los responsables de Prado Nuevo que escuchen la Voz del
Espíritu Santo, que se mantengan fuera de maldades, se conviertan y
que actúen con urgencia para,
PONER
TODO EL ESFUERZO A CONSEGUIR LA UNIÓN, EL AMOR Y LA PAZ EN ESA
BENDITA OBRA DE DIOS.
Y
SEGUIR ROGANDO A LOS SACERDOTES, QUE ORGANICEN, EN ESTAS ESPECIALES
CIRCUNSTANCIAS, EL REZO DEL SANTO ROSARIO!
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